Cualquier persona que sea testigo de un acto inseguro debe intervenir antes de que ocurra un accidente. Esto es válido tanto para técnicos de prevención, superiores jerárquicos, compañeros e incluso personas ajenas a las tareas que se están llevando a cabo de forma insegura. Las pautas que deben de seguir durante estos casos son:
- Acercarse al trabajador sin perder la calma. Cuidar de que el lenguaje gestual no contradice la serenidad que buscamos mantener con nuestras palabras.
- Hablar empezando por un comentario positivo, por ejemplo, sobre la labor que lleva a cabo y sobre las medidas de seguridad que está cumpliendo.
- Mencionar el acto inseguro del que se ha sido testigo y las posibles consecuencias que podría acarrear.
- Preguntar al trabajador si cree que existen diferentes alternativas para llevar a cabo la labor de forma mucho más segura.
- En algunos casos, de forma especial cuando el testigo tenga responsabilidad en materia de seguridad en el trabajo, sería convienen invitar al trabajador a exponer sugerencias más generales que se encuentran relacionadas con la seguridad. No hay que olvidar que la experiencia puede ser útil en este sentido y que puede enseñarnos aspectos que no conocíamos.
- Solo en el caso de que no consigamos un cambio en la actitud del trabajo deberemos mencionar las posibles consecuencias disciplinarias a las que pueda verse expuesto.
- Agradecer al trabajador por su tiempo, y muy especialmente, por su actitud receptiva.
Una gestión preventiva óptima ha de contemplar también las actitudes de los trabajadores, que nos dan la clave de sus esquemas cognitivos y de sus predisposiciones afectivas, cuestiones fundamentales para el tratamiento del riesgo en la empresa y, por tanto, de la seguridad. El análisis propuesto se inicia con un dato objetivo: el cumplimiento o no de los procedimientos de prevención por parte de los trabajadores. A partir de aquí corresponde al analista averiguar si dicho comportamiento puede ser considerado como un acto arriesgado o inseguro. Sólo a partir del momento en que tal cosa esté clara será posible plantear las medidas de intervención adecuadas en cada caso concreto.