MANEJO A LA DEFENSIVA
Hay actividades que se realizan prácticamente dentro de todos los centros de trabajo por algunos de los miembros de la organización y una de ellas es manejar un vehículo. Ya sea uno dentro del área del propio centro o fuera, o claro está, todos aquellos que al trasladarse de su domicilio al centro de trabajo y viceversa lo hace ejecutando esta acción. Es algo tan cotidiano que, como pasa normalmente, damos por sentado que no pasa nada y dejamos de interesarnos por los riesgos por dicha acción.
PONERSE LA CAMISETA
Cuando entramos a laborar en un puesto de trabajo, nos motivan diferentes factores: percibir un buen ingreso, crecer profesionalmente, aprender sobre el área/industria, entablar relaciones, entre otros. Cada uno de estos factores a veces los establecemos como metas propias y para alcanzarlas damos todo lo que está de nuestra parte (y hasta más) y no falta aquel miembro de la empresa que siempre nos indica que hay que “ponerse la camiseta” si realmente queremos lograrlo…pero, ¿qué es y qué implica “ponerse la camiseta”?
En la mayoría de las empresas este término se ha acuñado como el apoyo físico y mental extra que como colaborador podemos -y según ellos- debemos dar. He conocido casos que el apoyo incluso es económico o moral, pero implica la disponibilidad de nuestra persona para continuar ejerciendo nuestras funciones (y más) sobrepasando muchas veces nuestras capacidades y por ende poniendo en riesgo nuestro bienestar.